A pesar de estar en la era de la imagen, de la edición y de la fotografía,en nuestro pensamiento no solo hay imágenes, también palabras, muchas más que imágenes.
Una sola palabra puede provocar alegría, risa, miedo, tensión, nerviosismo; con la palabra nos declaramos, nos quejamos, nos disculpamos, pensamos, nos enamoramos, mentimos e incluso manipulamos. Simplemente es imposible vivir sin ellas, porque somos pensamiento y sentimiento y ambos necesitan de la palabra.
Te propongo una actividad individual:
La foto anterior aúna imagen y palabra. Como puedes ver, es un corazón delimitado por palabras y expresiones relacionadas con sentir, amor o corazón.
Haz tú una con la forma y palabras que desees. Recuerda que imagen y palabras deben estar relacionadas. Si decido delinear un barco, incluiré palabras que estén relacionadas con el mar, no sólo de manera obvia, sino de manera personal, por ejemplo, puedo incluir qué provoca en mí un barco.
